Tras los aranceles de Donald Trump a la industria automotriz, México quedó bien posicionado para mantenerse como uno de los jugadores más importantes del mundo. Sin embargo, se avecina un periodo de ajuste en el que las armadoras buscarán adaptarse al nuevo orden comercial planteado por Estados Unidos, con paros parciales, recortes de producción y otras acciones, señaló el experto en el sector, César Roy Ocotla.
Indicó que ese periodo de adaptación pasará y México seguirá recibiendo inversiones del sector automotriz, pues Trump dio un voto de confianza al país, y es previsible que el tratado comercial se mantendrá, y con él la posibilidad de que continúen las exportaciones desde México hacia Estados Unidos.
Por otro lado, el especialista observó que algunas firmas del sector ya enfrentaban problemas previos, que ahora tratarán de justificar con el tema de los aranceles para recortar actividades, producción y empleos.
Citó el caso de Stellantis, que anunció un receso de actividades en México y en Canadá.
Pero la razón principal no son los aranceles, sino que sus vehículos RAM Promaster no tienen suficiente demanda.
Lo mismo ocurre con Nissan y varios de sus modelos de la marca Infiniti, que no tuvieron éxito.
En una situación distinta se encuentra Audi, ya que algunos de sus vehículos con buena demanda en Estados Unidos no cumplen con las reglas de origen, por lo que ya anunció que dejará de exportarlos a ese país; tal es el caso del modelo Q5, señaló.
Con este nuevo orden comercial global impulsado por Trump, habrá ganadores y perdedores.
En este sentido, destacó la recién anunciada inversión de Volvo en Nuevo León, que destinará mil millones de dólares para fabricar camiones pesados.
Roy Ocotla subrayó el buen desempeño del gobierno de México, encabezado por Claudia Sheinbaum y con Marcelo Ebrard como eficaz negociador, lo que evitó que el país resultara más afectado.
Opinó que México debe buscar otros horizontes comerciales con China, Brasil, Japón, Singapur y Vietnam, para romper la dependencia comercial y económica que mantiene con Estados Unidos.