Marcelo Ebrard, titular de la Secretaría de Economía (SE), anunció la cancelación del registro de mil 62 molinos de acero incluidos en el padrón de importadores, tras detectar múltiples irregularidades en sus operaciones. La medida se da en cumplimiento de una instrucción directa de la presidenta Claudia Sheinbaum, con el objetivo de fortalecer la competitividad de la industria siderúrgica mexicana.
El funcionario explicó que la dependencia ha inspeccionado hasta ahora 2 mil 233 registros de molinos, de los cuales aproximadamente la mitad presentaron inconsistencias, falsedad documental o simplemente no existen. Las inspecciones se han llevado a cabo con personal desplegado en al menos seis países, incluido Malasia, sin que se revelaran más nombres por motivos de confidencialidad operativa.
EVITARÁN IMPORTACIÓN CON REGISTROS FALSOS
“Vamos a hacer un proceso de cancelación y desincorporación… eso significa la mitad de los molinos que han sido presentados por empresas”, señaló Ebrard desde Palacio Nacional. La medida pretende impedir el uso de registros apócrifos para importar productos siderúrgicos, lo que permite a algunos comercializadores eludir impuestos, cuotas compensatorias y reglas de origen.
Al eliminar estos registros, se busca también frenar prácticas de triangulación comercial, una estrategia comúnmente utilizada para ocultar el verdadero país de origen del acero e ingresar mercancía a México con menores cargas arancelarias.
AFECTACIÓN A LA INDUSTRIA Y RESPUESTA OFICIAL
El sector siderúrgico mexicano es de gran relevancia para la economía nacional. Según datos expuestos por el titular de Economía, México ocupa el lugar 15 entre los principales productores mundiales de acero, con 683 mil empleos vinculados a la industria y una inversión estimada de 14.1 mil millones de dólares.
“Lo que buscamos es que el productor nacional tenga condiciones justas de competencia con lo que se importa”, enfatizó Ebrard. Añadió que prácticas como las detectadas constituyen una desventaja grave para la industria nacional, al permitir la entrada de acero en condiciones desleales que afectan directamente a los empleadores y trabajadores mexicanos.
El proceso de cancelación se implementará en los próximos días como parte de un esfuerzo mayor para garantizar un comercio más justo y equitativo en beneficio de la planta productiva nacional.