Cerca de cien empresas en San Luis Potosí han comenzado a experimentar afectaciones económicas debido al gravamen del 25 por ciento aplicado a todas las importaciones de acero y aluminio, informó Héctor D’Argence Villegas, director del Parque Industrial Fundidores.
La medida ha generado un incremento en los costos de producción, lo que afecta principalmente a sectores como la fundición, el automotriz, el de electrodomésticos y línea blanca, así como la fabricación de bicicletas.
“Desafortunadamente, nos afecta bastante, sobre todo a quienes tenemos dentro de nuestros procesos la fabricación de productos tanto de aluminio como de acero. Los principales sectores afectados, además de la fundición, son el automotriz y el de electrodomésticos y línea blanca, bicicletas, ya que se encarecen los productos”, explicó.
El directivo también advirtió sobre el impacto en el empleo, señalando que las empresas podrían reducir jornadas laborales o implementar descansos forzados. “Podría haber disminuciones en las jornadas laborales o días de descanso forzados. Ya estamos empezando a resentir esta medida impuesta por Donald Trump, por lo que esperamos que se rectifique pronto”, afirmó.
San Luis Potosí alberga una alta concentración de empresas dedicadas a la industria acerera, automotriz, de fundición y electrodomésticos, las cuales se encuentran entre las más afectadas por la medida. Se estima que entre 15 mil y 20 mil trabajadores del sector podrían resultar impactados.
D’Argence Villegas destacó que el costo de exportación también se verá incrementado entre un 15 por ciento y 20 por ciento, lo que dificultará la competitividad del sector en el comercio internacional.
Finalmente, exhortó a las autoridades y al sector empresarial a buscar soluciones para mitigar el impacto económico y evitar mayores consecuencias en la industria local.