Si eres dueño de un gato, probablemente has notado cómo, en momentos de calma, tu compañero felino cierra lentamente los ojos, a menudo sin llegar a cerrarlos por completo.
Este gesto, que se parece a lo que los humanos interpretamos como una sonrisa relajada, es lo que los expertos han bautizado como el parpadeo lento.
Un equipo de investigadores liderado por Karen McComb y Tasmin Humphrey, de la Universidad de Sussex, se propuso estudiar este comportamiento felino, del que muchos dueños ya sospechaban su naturaleza comunicativa.
¿Podría ser que este parpadeo fuera una especie de saludo amistoso entre gatos y humanos? Según los resultados del estudio, la respuesta es un rotundo sí.
El parpadeo lento, en esencia, parece ser una forma de comunicación de bajo riesgo para los gatos. cerrar los ojos lentamente, un gesto que denota relajación y vulnerabilidad, puede ser su manera de decir: “Estoy tranquilo, no representas un peligro”.