La primera ruta, como se ha mencionado aquí, a partir de datos revelados por el gobernador Ricardo Gallardo, iniciará en el Circuito Potosí Norte, en el cruce con la salida a Zacatecas, circulará por Fray Diego de la Magdalena, Damián Carmona, Avenida de la Paz y la Alameda. Desde ésta partirá después a la Zona Industrial. Iniciará con 20 camiones pero en poco tiempo se duplicará la cifra para llegar a 40.
Lo que el gobierno de Carreras no logró en sus seis años, lo hará Gallardo en poco más de uno: echar a andar el llevado y traido sistema de transporte, al que ya no se sabe si llamarle Metrobús, Red Metro o Transabús. En los últimos mese se había especulado se sería denominado Mi Bus, pero dado que el gobernador Gallardo casi nunca se refiere al mismo de esa forma, sino como Metrobús, podría inferirse que no le convence el nombre.
A como iba en el gobierno de Carreras, el sistema Red Metro no llegaría a ningún lado, fue sólo de un barril sin fondo que sirvió para el saqueo.
Con el replanteamiento que se hizo en el gobierno actual se logra algo muy importante: la ruta será más amplia, pues correrá desde norte de la ciudad (salida a Zacatecas) hasta la Zona Industrial, es decir, incorporará más colonias y no tendrá como un punto de origen y retorno la Alameda, en el Centro Histórico, como era la pobre visión del gobierno pasado.
En febrero estará en operaciones con 20 unidades, que escalarán a 40; la intención es que se le perciba rápido como un sistema de transporte dinámico, rápido y eficiente, a diferencia del actual transporte urbano.
En marzo o semanas después iniciaría de forma inmediata la construcción de la ruta perimetral, que circulará por todo el Circuito Vial Potosí.
Así habrá dos rutas, en alrededor de dos años del gobierno actual, algo que los gobiernos de la maldita herencia no lograron ni en 10 años.
FISCALÍA, BIEN LIBRADA; LOS DIPUTADOS, NO
José Luis Ruiz se presentó ante Congreso local para comparecencia ante diputados, por el primer informe de actividades que presentó hace unos días. Su intervención fue muy ecuánime e institucional.
Ruiz explicó algo que a veces se pasa por alto, cuando se trata de sus funciones: la FGE tiene un trabajo dinámico, que varía los 365 días del año, nunca es igual un día al otro, por lo impredecible de las tareas de seguridad y justicia.
Pero pese a esa complejidad, se han logrado resultados en el combate a delincuencia, señaló.
¿Lo malo?, sí, sí lo hubo.
Hubo comportamientos de los diputados que rayaron en lo ridículo. Sin mesura, inteligencia o muestra de un respeto institucional, la mayoría de los curuleros se exhibieron prácticamente como trapeadores, se deshicieron en elogios, rogaban por abrazos y selfies, sin el más mínimo recato.
No tuvieron una sola intervención que valiera la pena, pues se advierte que no conocen el tema y ni el informe habían leído.
