Uno de los aspectos que analizaba desde hace meses Mauricio Ramírez era la escasa movilidad política que le había ofrecido el PRI, partido que incluso lo “bajo” de una candidatura a diputación federal que ya tenía casi en la bolsa, cobijado por la Coalición Va por México, para el Distrito Electoral Federal II, con cabecera en Soledad.
De última hora, los mandamases del tricolor lo regresaron a buscar la reelección en el distrito local que actualmente ocupa, la cual ganó. Muy probablemente hubiera resultado también triunfador en la elección federal, de haber sido candidato. La diferencia entre el candidato del PVEM, Juan Manuel Navarro, quien se alzó con la victoria, y Marianela Villanueva, de la Coalición Va por México (PRI, PAN, PRD) fue de poco más de 3 mil votos. Con el apoyo operativo y financiero de la CTM, seguramente Mauricio hubiera dado una batalla más dura.
Además de que no se le olvidó ese descontón que le propinó su partido, en la reflexión de Mauricio también está lo que viene: el 2024.
Se infiere de algunas de las primeras declaraciones de Mauricio que será el dirigente estatal de Movimiento Ciudadano y que no ha negociado aún cargo de elección alguno para 2024.
Sin embargo, no será necesario hacerlo si es el dirigente estatal, pues a partir de esa posición tendría por lo menos asegurado cualquier cargo de elección a nivel estatal; sin embargo, su tirada parece ser por lo menos una diputación federal.
Movimiento Ciudadano va en ascenso, no solo tiene algunas figuras atractivas para las nuevas generaciones, como Luis Donaldo Colosio Riojas, que aparece ya en las encuestas como un bien evaluado aspirante presidencial; también están los mandatarios de Nuevo León y Jalisco, Samuel García y Enrique Alfaro. También pudiera ser el partido que abra sus puertas a Marcelo Ebrard y/o Ricardo Monreal, si como se advierte desde ahora Morena decide postular a Claudia Sheinbaum, lo que provocará su ruptura.
Ese sería el factor que detonaría el crecimiento de MC, la postulación de los heridos de Morena, más aún si a partir de ahí se aglutina un nuevo bloque opositor, nutrido desde el mismo lopezobradorismo.
No hay que olvidar la cercanía entre Marcelo Ebrard y Dante Delgado, el patriarca de Movimiento Ciudadano. Quien esto escribe estuvo presente hace tiempo en un desayuno convocado por ambos en un restaurante de SLP, cuando se disputaba la sucesión presidencial de 2012, en donde se manifestó su excelente relación.