Para ello, quedó ya integrado el Comité de Adquisiciones el mismo día de la toma de posesión, con objeto de empezar a atender ese asunto.
La empresa que prestaba el servicio de arrendamiento de patrullas, además de otros vehículos, como pipas de agua, le hizo saber al ayuntamiento que los había retirado de la ciudad, supuestamente porque las pidió “un cliente” de otra entidad. Parece más bien una forma de presión, pues es poco probable que hubiera interesados en rentar unidades con tres años de uso, en lugar de nuevas.
Como sea, ya sea que se renueve con la misma empresa (lo cual es improbable, por la manera áspera en que actuó la arrendadora) o que se contrate con otra, el tema deberá salir en los próximos días.
Mientras tanto, el gobernador Gallardo ofreció apoyo al alcalde para vigilar la ciudad.
Otro asunto es el servicio médico, que actualmente presta un nosocomio privado, cuyo director también dio un trato despectivo a funcionarios municipales, por lo que el contrato podría cambiar de empresa, pues hay varias interesadas.
Además de ese tema, el alcalde proyecta un rediseño inmediato de la seguridad, cuyo mando recibió personalmente en los primeros minutos del 1 de octubre.
Otra tarea pendiente del alcalde es completar el gabinete, ya se dieron a conocer los principales nombramientos, además de que el Cabildo avaló los 9 principales que marca la ley, entre ellos los de Secretario General, Tesorero y Contralor.
GALLARDO Y GALINDO, EL NUEVO COMBO
No era el combo que estaba planeado, pero parece que las relaciones empiezan bien entre el gobernador Ricardo Gallardo y el alcalde Enrique Galindo, pues ya hasta obras de gran impacto proyectan juntos, como la nueva ruta paralela al Río Santiago y posiblemente otra vialidad de alto impacto en la zona sur, que podría ser la Prolongación Salk, para agilizar la conexión con el sector fabril.
Gallardo también ofreció ayudar a Galindo a revivir el cadáver en que quedó convertido el Interapas y a solucionar el recurrente problema de la presa El Realito.
OMINOSO SILENCIO DEL GRUPO DE INFRAESTRUCTURA POTOSINO
Se desplomó un puente en la carretera Cerritos-Tula que tiene concesionada, pero el Grupo de Infraestructura Potosina no emitió ni un boletín, ni un pésame a los deudos de la víctima fallecida, lo que es un ejemplo de la negligencia con la que opera esa empresa, que supuestamente por falta de mantenimiento ocasionó el percance.
Además, este sábado se supo de un nuevo percance en el mismo puente, que acabó de desplomarlo, afortunadamente sin víctimas.
Ya en otro espacio de este medio referimos que expertos consideran que la causa del accidente fue la falta de mantenimiento oportuno de la vía, por lo que mínimo los representantes de la empresa deberían haber dado la cara de inmediato.
Hasta donde se sabe, el actual representante legal es Javier Peláez Goicochea. Al parecer ese Grupo está constituido en un 70 por ciento por las empresas foráneas Pavilsa, de Chihuahua, y Profezac, de Zacatecas. Los socios locales tienen un 30 por ciento, y son Paviasfaltos, de Manuel Muñiz Werge; GyG, de Samuel González; Concreser, de Tirso González, y Prodin, de Alfonso César.
Quizá ha habido cambios en la composición accionaria, pero esos son los datos que hay en el gobierno estatal.