El especialista señala que en nuestra entidad proliferan las encuestas “patito”, pues los partidos y candidatos pagan fuertes cantidades para estar en los primeros lugares de las preferencias electorales.
Lo hacen con objeto de engañar a líderes de opinión, alcaldes y otras autoridades, empresarios, medios de comunicación y a la población, con objeto de conseguir apoyos políticos y/o económicos.
Hasta ahora lo han hecho con total impunidad, pues no hay autoridad electoral que lo impida. Tampoco los partidos afectados ni los ciudadanos han pedido información ni han denunciado estas anomalías.
Para empezar, el INE y el Ceepac bien podrían sacar cálculos de los precios de esas encuestas y cargarlas como propaganda a los gastos de campaña de los candidatos beneficiados con las cifras engañosas.
Para muestra, basta esta encuesta de la firma Arias Consultores (se omiten nombres de los candidatos y partidos, para no amplificar mentiras) sobre la elección para gobernador de SLP: coloca a un candidato en primer sitio, con el 31.3 por ciento de las preferencias, cuando según otras firmas va en tercer lugar. Y al partido de la Cuarta Transformación, que en todo el país es el puntero o disputa el liderazgo, le asignó un increíble 4.3 por ciento.
De acuerdo con la normatividad vigente, las empresas que publiquen encuestas en SLP están obligadas a presentar en un plazo de 5 días posteriores a su difusión la base de datos de la misma, copia de la factura que pagaron, metodología y más documentación.
Entre los datos que deben entregarse al órgano electoral están el número de cuestionarios aplicados, informar si fue vía telefónica, casa por casa o por Internet, el índice de no respuesta, entre otros.
No se sabe si todas esas encuestas que han circulado en redes sociales y medios de comunicación han cumplido con la disposición.
Las autoridades electorales deberían presentar un reporte de las empresas que han cumplido con la ley y señalar a las omisas.
Aun si cumplieran con la ley, es de dudarse que los órganos electorales cuenten con el personal especializado para determinar si las encuestas son “cuchareadas” o no. Pero por lo pronto podría realizar una campaña informativa para advertir a la población que no crea en esas mentiras. Basta con que difundan los datos de la gran variabilidad que existe en los resultados.
Por otro lado, al parecer tanto el INE como el Ceepac no tienen facultades para intervenir en las plataformas digitales, que es la vía favorita de candidatos y partidos para difundir las encuestas.
Los medios de comunicación, por nuestra parte, podríamos alcanzar el acuerdo de no difundir encuestas “patito”.
Podría decirse que solo muy pocas casas encuestadoras mantienen el profesionalismo y ofrecen datos más o menos confiables, una de ellas es Consulta Mitofsky, que hace algunos días reveló un estudio sobre las preferencias electorales rumbo a la gubernatura.
GALINDO, CON PESO EN PLAN DE SEGURIDAD DE OPG
Por la importante trayectoria que tiene dentro del sector, Enrique Galindo fue de los principales autores del plan de seguridad de Octavio Pedroza. Sus aportaciones, emanadas de la experiencia que acumula en cargos a nivel municipal, estatal y federal, fueron fundamentales para la elaboración de la propuesta de la coalición Sí por San Luis, para el problema que mas preocupa a los potosinos.
Uno de los integrantes de la mesa de coordinación de la coalición Sí por San Luis, dijo a esta columna que el tema de la seguridad puede ser fundamental para que ese bloque gane la elección. Más aún si se vende la idea de que la mancuerna Octavio-Galindo sería más efectiva para combatir a la delincuencia, en comparación con las otras fórmulas. “Galindo es garantía de que se atendería de manera frontal y transversal este grave problema”, nos dijo el directivo de ese bloque partidista, de extracción priista.