Por ello, la reestructura de la deuda pública bancaria es importante, porque permitiría cubrir ese hueco en las finanzas públicas.
Básicamente lo que el gobierno estatal propone es dejar de pagar el servicio de la deuda, consistente en capital, intereses más algunos conceptos menores, durante un año y pocos meses más.
Eso le daría un flujo cercano a los 550 millones de pesos, una cifra muy parecida a los gastos derivados del Covid-19.
Con ello, se recuperaría ese dinero, con objeto de que se destine a proyectos de infraestructura o a otros rubros del gasto gubernamental.
No se sabe aún si será suficiente con la reestructura, o será necesario solicitar una línea de crédito por 700 millones de pesos.
PROYECTOS DE OBRA EN RIESGO
Todas las obras de la agenda metropolitana dada a conocer a inicios de 2020 están comprometidas en su ejecución, si no se logra darles viabilidad financiera, tras los gastos emergentes por la pandemia.
Entre esos proyectos están las rutas alternas a la Zona Industrial a través de las avenidas Salk y Prolongación Juárez, así como otros puentes y ramales.
En el caso de las vías alternas, funcionarios del gobierno estatal nos dijeron que los trabajos y la elaboración de expedientes en la parte jurídica tenían avances muy importantes en marzo pasado, pero quedaron de súbito en stand by. Para esas obras quizá no se requieran fondos estatales, si las empresas Grupo Meta y Coconal aceptan construirlas con recursos propios, a cambio de ampliar los plazos de las concesiones de carreteras de cuota que manejan en territorio potosino.
Lo que pretende Juan Manuel Carreras es que ninguna de las obras metropolitanas se cancelen; de algunas se podría posponer el inicio de su ejecución, para quizá concluirlas en el primer bimestre de 2021 o poco después, pero aún dentro del sexenio actual.
Eso solo si hay suficiencia presupuestal y puede realizarse por lo menos la reestructura de la deuda pública bancaria.
ASEGURADOS, PUENTE PERIFÉRICO Y PEMEX
Ante la escasez de recursos, una duda que existía desde hace semanas era si estaban en riesgo de suspenderse obras ya en curso que se realizan con aportaciones del gobierno estatal, como el puente en Periférico, Españita, Industrias y la 57, así como el de Pemex en Salvador Nava, que ejecuta el ayuntamiento capitalino.
Ya nos dijeron en gobierno que no existe tal riesgo; el financiamiento de esas obras está asegurado, porque en ambos casos tienen fuente de recursos propia, vía el Fondo Metropolitano del 2019.
NUEVA NORMALIDAD, EN GOBIERNO ESTATAL
En el Palacio de Gobierno y en otras oficinas públicas poco a poco se regresa a la actividad. En días pasados, en el ala que corresponde a la Secretaría de Finanzas, empezamos a ver un mayor movimiento.
El acceso al público está cerrado, continúan los filtros, pero ya vimos a funcionarios de primero y de segundo nivel que ingresan a las oficinas, entre ellos, a Daniel Pedroza, el titular de la Secretaría.
Pedroza nunca dejó de acudir a Palacio, en semanas anteriores era común verlo salir de su oficina, mientras lo aguardaba su vehículo en la calle de Madero.
También es el caso de las Subsecretarías de la General, cuyos titulares también estuvieron en Palacio en estas últimas semanas.
Mientras tanto, el gobernador Juan Manuel Carreras coordina las tareas, mantiene un ritmo de trabajo normal, que lo lleva a primera hora a las reuniones de seguridad en el C4, después a las que se realizan en la torre de la Sedeco o en Casa San Luis, casi todas relacionadas con las tareas de la pandemia en los temas sanitario y económico.