Nissan Motor Co. ha sido degradada a calificación especulativa o “basura” por las tres principales agencias de crédito, tras una segunda rebaja en cuestión de días.
Fitch Ratings redujo la calificación del fabricante de automóviles a BB+ desde BBB-, señalando que la empresa enfrenta ganancias débiles y una recuperación incierta. La semana pasada, Moody’s también rebajó su calificación, mientras que S&P Global Ratings mantiene a Nissan en grado especulativo desde marzo de 2023.
“La rebaja refleja la rentabilidad persistentemente baja de Nissan, con una trayectoria de recuperación retrasada en contra de nuestras expectativas”, explicaron analistas de Fitch, liderados por Satoru Aoyama, en un informe publicado este miércoles. “Esperamos que la rentabilidad siga bajo presión durante los próximos uno o dos años”.
PRONÓSTICO FINANCIERO NEGATIVO Y FRACASO EN NEGOCIACIONES CON HONDA
La situación financiera de Nissan se deterioró aún más este mes, cuando la compañía redujo sus proyecciones de ingresos y ganancias operativas. La empresa prevé una pérdida neta de 80 mil millones de yenes (aproximadamente 535 millones de dólares) para el año fiscal que finaliza en marzo.
Estos resultados han intensificado la presión sobre la directiva de la compañía, que ahora enfrenta el reto de encontrar nuevas estrategias de recuperación. La incertidumbre se agrava tras el fracaso de las negociaciones de fusión con Honda Motor Co., un acuerdo que podría haber brindado estabilidad y sinergias operativas en un mercado altamente competitivo.
Con la degradación de su calificación crediticia, Nissan enfrenta mayores costos de financiamiento y un escrutinio más severo por parte de inversionistas, lo que complica su recuperación en el corto y mediano plazo.
