CIUDAD DE MÉXICO.– A pesar del llamado de la presidenta Claudia Sheinbaum a abrir una discusión más amplia sobre la reforma a la Ley de Telecomunicaciones, el presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, afirmó este viernes que la discusión y posible votación del dictamen sigue programada para el lunes, tal como estaba previsto.
“La compañera presidenta comentó la posibilidad de que no se apruebe la ley de telecomunicaciones. Estaba programada para el lunes; seguirá programada para el lunes”, indicó Noroña en declaraciones a medios. No obstante, admitió que aún no existe una decisión definitiva y que se valorará, en diálogo con Sheinbaum, si se aprueba en este periodo ordinario o se traslada a uno extraordinario.
POSIBLE AJUSTE DEPENDERÁ DEL DIÁLOGO CON EL EJECUTIVO
Noroña recalcó que su movimiento es “democrático” y “respetuoso de las libertades”, desestimando las críticas de la oposición, a la que acusó de tergiversar el contenido de la iniciativa.
“Si es necesario darle más tiempo, se dará”, sostuvo, aunque insistió en que las críticas que apuntan a riesgos de censura o concentración de poder son, en su opinión, “pura grilla”.
CONTRADICCIONES INTERNAS EN MORENA
Durante la mañana, la senadora morenista Guadalupe Chavira había anunciado que el proceso legislativo se aplazaría para dar espacio a una discusión pública más amplia. De igual modo, el senador José Antonio Álvarez Lima expresó su acuerdo con la postura de Sheinbaum de abrir el debate y evitar la percepción de imposiciones.
Esta diferencia de mensajes refleja tensiones internas en el oficialismo respecto al ritmo y las condiciones para aprobar una ley que ha generado una fuerte controversia.
UN DEBATE QUE SIGUE ABIERTO
Claudia Sheinbaum pidió en su conferencia matutina que se modifique o elimine el artículo relacionado con la facultad de ordenar bajas de plataformas digitales, a fin de evitar cualquier percepción de intento de censura. También propuso que el Senado convoque a un periodo extraordinario si se requiere más tiempo para enriquecer la iniciativa.
Mientras tanto, el Senado se encuentra en una encrucijada: seguir adelante con la aprobación inmediata o atender el llamado presidencial y ampliar el debate, en un contexto donde la oposición, organizaciones civiles y expertos siguen expresando profundas preocupaciones sobre los alcances de la reforma.
El desenlace se definirá en los próximos días, conforme avancen las negociaciones políticas entre el Congreso y el Ejecutivo.